miércoles, abril 21, 2010

Una visita sorpresa


Este es mi amigo Ernesto Forteza. Es cubano. Trabaja como fotógrafo y algo más en el Listín Diario. Fue la primera persona con quién salí "a la calle", cuando todavía era pasante. Lo recuerdo muy bien: fue una entrevista a Lorena Oliva, una actriz de teatro de origen argentino. Estaba presentando una adaptación, en un monólogo, de "La Odisea" de Homero, en el Auditorio Patrick Hudson de El Dominico Americano. No tenía grabadora, porque se supone que sólo iría a contactar la entrevista. Pero ella estuvo dispuesta a dármela con todo y el cansancio de la presentación. Con su vaso higiénico de agua, con la respiración entrecortada y algo agitado en tono de la voz, Lorena conversó conmigo de lo más ameno, obviando mi novatada, mi falta de grabadora y mis manos sudorosas. Ernesto se mantenía distante, y de vez en cuando comentaba algo durante la entrevista, algo muy usual si le interesa el tema. Con el tiempo los dos hacíamos la entrevista... era encantador. Fue mi primera entrevista, la de Lorena y su Odisea. Y para mí ha sido lo mejor que he escrito. Mi primera publicación. Mi primera vez de ver mi firma "Nazaret Espinal" desplegarse orgullosa en una de las páginas del Decano. Recuerdo ese sábado. Me temblaban las manos mientras buscaba el artículo al que le habían dado media página. Lo leí, lo leí y lo leí, tantas veces pude ese día y al siguiente, encontrándole errores y pensando en una nueva forma de escribirlo. Estaba tan emocionada. Ernesto, de su lado, me dijo que le había gustado la foto. Pronto comenzamos a salir muy a menudo y nuestras salidas fueron verdaderas horas de diversión (a veces) y desahogo. Disfrutábamos el trabajar juntos y el día a día nos fue haciendo amigos. Los demás fotógrafos decían que yo sólo quería a Ernesto. Y en realidad, algo diferente me une a este señor de pelo blanco, inteligente, estratega y de grandes historias. Recuerdo en especial el viaje que hicimos juntos a Rancho Arriba, San José de Ocoa, para entrevistar en una "lead" informal a Don Hugo Tolentino Dipp. Fue hace poco, creo que a finales del 2008. La pasamos estupendamente e hicimos un buen trabajo de equipo. Nunca lo olvidaré. Este lunes pasó con dos amigos más por mi nuevo lugar de trabajo. Desde que salí empezó a tomarme fotos. Yo corrí emocionada a saludarles y a quien primero atiné a atrapar en un abrazo fue a Ernesto. La foto que encabeza este texto es el reflejo del momento. No pasaron bien los minutos cuando empecé a llorar. Ernesto entonces me besaba la cabeza, como hace un padre con su hijo, porque sepan que el dice que soy como su hija. Fue una gran sorpresa. Y quiero compartir las fotos que con tanto cariño me hizo para que me viera en mí ahora, nuevo lugar. Ernesto, con dolor, unos días antes de marcharme, me dijo que todo en la vida es un ciclo. Yo ya había cumplido el mío, insistía. Aunque eso no le agradara del todo. A pesar de ser una persona poco expresiva, puedo sentir su cariño incluso atravesando las distancias. Cosas como esa me llenan de fuerza en este tiempo de prueba. Gracias muchachos por su visita. No se imagina lo mucho que significó para mí. ¡Les quiero mucho!

4 comentarios:

Yuan dijo...

Me alegro "verte" aunque sea por estas fotos. Siempre te recuerdo con cariño. Leerte es una bendición.
Abrazos desde esta ciudad que amanece a la primavera.

Roberto Lone dijo...

La alegría de los amigos y la sabiduría.

Bendiciones!

JUANGASPAR dijo...

HOLA LOS INVITO A MI BLOG, DONDE RESEÑO LA VIDA DE UN INDOCUMENTADO MEXICANO EN E.U.
AL DIA DE HOY, LA MARCHA EFECTUADA EN LOS ANGELES. ESPERO TU VISITA. Y VOLVERÉ A LEER MAS DE TU BLOG. GRACIAS.

maybe dijo...

I'm appreciate your writing skill.Please keep on working hard.^^