jueves, octubre 30, 2008

Buenas Noticias



No que "The Philadelphia Phillies" ahora son los nuevos campeones del las Grandes Ligas. Aunque es una buena noticia para ellos (después de esperar 28 años) y para quienes los apoyaban. A mi me da igual. Tampoco era de "Tampa", so... (practicando el inglés que tengo exámen, jejejeje).
"The good new" es que conseguí un autografó de Michel Camilo. Yo lo admiro y me encanta su música, en especial esas combinaciones de latin jazz y su dúo con Tomatito. ¡Excepcional! El martes estuvo en el programa radial "besos y abrazos con Raquel y José" que se transmite por la estación 97.7 de Radio Listín. Yo no podía quedarme porque tenía clases en el Dominico, así que le pedí al fotógrafo que iba a cubrir la entrevista, que le pidiera para y por mí, un autógrafo. Yo la verdad dudaba que se acordara y por más que intenté comunicarme con él para 'acordárselo', no pude.
Pero ¡oh sorpresa! Al llegar esta mañana encuentro pegado al monitor de trabajo su foto con el autógrafo: Para Nazaret. ¡Que bien! Dice otra cosa, pero no logro decifrar bien lo que es. Además, su firma. Yupi!!!
Yo estoy muy contenta. No lo pude conocer, pero algo es algo.

Por último, pero no menos importante, Dios en este día nos dice que para el somos como polluelos. ¡Que lindo papá Dios! Yo soy su pollita, jejejeje! En serio. Jesús habla en el Evangelio de hoy que quiere arrullarnos como la gallina a sus pollitos: bajo sus alas. Su muerte con los brazos abiertos lo confirma: el siempre esta dispuesto a recibirnos, con los brazos abiertos.

Para todo lo atormentada de trabajo que estoy, esto me da un respirito. Gracias Jesús. Yo quiero ser siempre un pollito bajo tus alas, y descansar en Tu regazo.

Te amo mi Jesús.

Primera Lectura
Lectura de la carta del apóstol
san Pablo a los efesios (6, 10-20)
Hermanos: Busquen su
fortaleza en el Señor y en
su invencible poder. Utilicen
las armas que Dios les ha
dado, para poder resistir a
las asechanzas del diablo.
Porque no estamos luchando
contra fuerzas humanas, sino
contra las fuerzas espirituales
y sobrehumanas del mal, que
dominan y gobiernan este
mundo de tinieblas.
Por eso, para que puedan
resistir en los momentos difíciles
y quedar definitivamente
victoriosos, revístanse con
la armadura de Dios: que su
cinturón sea siempre la verdad;
su coraza, la justicia; su calzado,
la prontitud para anunciar el
Evangelio de la paz; que la fe
les sirva siempre de escudo
para protegerlos y apagar las
flechas incendiarias del enemigo
malo; pónganse el casco de la
salvación y empuñen la espada
del espíritu, que es la palabra de
Dios.
Y, con la ayuda del Espíritu
Santo, oren y supliquen
continuamente. Velen en
oración constantemente por
todo el pueblo cristiano y
también por mí, a fin de que
Dios me conceda hablar con
toda libertad para anunciar el
misterio de Cristo, contenido
en el Evangelio, del cual soy
embajador, aunque estoy
encadenado. Pidan, pues, que
tenga valor para predicarlo como
debo.
Palabra de Dios.
Te alabamos, Señor.

Salmo 143

Bendito sea el Señor,
mi fortaleza.

Bendito sea el Señor,
mi roca firme; él adiestró
mis manos y mis dedos
para luchar en lides.

Bendito sea el Señor,
mi fortaleza.

El es mi amigo fiel, mi fortaleza,
mi seguro escondite, escudo
en que me amparo, el que los
pueblos a mis plantas rinde.

Bendito sea el Señor,
mi fortaleza.

Al compás de mi cítara, nuevos
cantos, Señor, he de decirte,
pues tú das a los reyes la victoria
y salvas a David, tu siervo
humilde.

Bendito sea el Señor,
mi fortaleza.

Evangelio
† Lectura del santo Evangelio
según san Lucas (13, 31-35)
Gloria a ti, Señor.
En aquel tiempo, se acercaron
a Jesús unos fariseos y le
dijeron: “Vete de aquí, porque
Herodes quiere matarte”.
El les contestó: “Vayan
a decirle a ese zorro que
seguiré expulsando demonios
y haciendo curaciones hoy
y mañana, y que al tercer
día terminaré mi obra. Sin
embargo, hoy, mañana y pasado
mañana tengo que seguir mi
camino, porque no conviene
que un profeta muera fuera de
Jerusalén.
¡Jerusalén, Jerusalén, que
matas y apedreas a los profetas
que Dios te envía! ¡Cuántas
veces he querido reunir a tus
hijos, como la gallina reúne a sus
pollitos bajo las alas, pero tú no
has querido!
Así pues, la casa de ustedes
quedará abandonada. Yo les
digo que no me volverán a
ver hasta el día en que digan:
‘¡Bendito el que viene en el
nombre del Señor!’ ”.
Palabra del Señor.

Gloria a ti, Señor Jesús.

No hay comentarios: