La vida es un viaje, en la que cada uno somos "pasajeros". Durante nuestro paso ocurren un sin fin de aventuras increibles, algunas dignas de contar, otras, no tanto. Y, desde mi lugar de los hechos, quiero mostrar -a veces con alma de poeta, con nostalgia, dolor, alegría o música- todo lo que se me o me ocurra. Tal como soy: versátil, sencilla y auténtica.
miércoles, octubre 29, 2008
Honrar a tus padres
Honra a tus padres es el cuarto Mandamiento de la Ley de Dios. Y dice San Pablo que es el primer Mandamiento que trae consigo una promesa. Esa promesa es la siguiente: si lo haces, "te irá bien y tendrás larga vida", dice el Señor.
Dios no se equivoca. Y si nos da algo es por algún motivo. Nuestros padres, con sus defectos (todos lo tenemos) son los que nos han tocado. Y tenemos que amarlos, respetarlos y dar gracias a Dios por ellos. Sé que hay muchos casos difíciles de relaciones entre padres e hijos. Pero recuerdo algo que siempre me decía mi amigo Ismael: "El que obedece, no se equivoca". Sea cual sea tu situación, mantente obediente para con tu padre o tu madre. Si te han hecho daño, perdónalos. Pídele a Jesús que te enseñe a amarlos a pesar de todo. El amor todo lo puede vencer. Y más el amor Divino que viene del Padre.
Dios no instituyó a los padres por azar. Si lo tenemos es por una razón muy poderosa. Ellos tienen la misión de cuidarnos mientras estén vivos. No importa lo que hagan o no, nosotros, los hijos, debemos cumplir con nuestro parte. Al final cada uno recibirá su paga. Eso le toca definirlo a Dios. Entonces, aprovechemos el tiempo que tengamos junto a ellos. O junto a tus tutores, o tios o abuelos, si es tu caso, para estar con ellos, demostrarles cariño, AMOR. Para ser familia. Si luego quieres tener una al casarte y tener tus propios hijos, debes empezar bien con la que primero se te ha dado. El que no obedece primero, no puede luego querer dar ordenes.
Miremos a Jesús, que también es modelo de hijo. Pidámosle que nos ayude a ser buenos hijos, como Él.
Que Dios que es el que todo lo puede, ilumine nuestras vidas a la luz de esta Palabra. Que Él nos conceda el discernimiento para enteder este misterio de fe, y así aclare cualquier duda que tengamos. Que transforme nuestros corazones y los haga fuentes de amor, siempre prestos a dar.
Amén.
Lectura de la carta del apóstol
san Pablo a los efesios (6, 1-9)
Hijos, obedezcan a sus padres
por amor al Señor, porque eso
es justo. Honrarás a tu padre y
a tu madre es un mandamiento
muy importante, que lleva
consigo esta promesa: Te irá
bien y vivirás largo tiempo en la
tierra.
Padres, no exasperen a sus
hijos; más bien fórmenlos y
corríjanlos, para educarlos bien,
como el Señor quiere.
Esclavos, obedezcan a sus
amos de este mundo con
docilidad, respeto y sencillez
de corazón, como a Cristo; no
sólo cuando los están mirando,
ni sólo para quedar bien con
ellos, sino como esclavos de
Cristo, que cumplen de corazón
la voluntad de Dios. Sírvanles,
pues, de buena gana, como
quien sirve al Señor y no a los
hombres, recordando que cada
uno, sea esclavo o libre, será
recompensado por el Señor,
según el bien que haya hecho.
Y ustedes, amos,
correspondan a sus esclavos
en una forma semejante.
Absténganse, pues, de toda
clase de amenazas, recordando
que tanto ellos como ustedes
tienen el mismo amo, que está
en los cielos y en el cual no hay
favoritismos por una persona o
por otra.
Palabra de Dios.
Te alabamos, Señor.
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Reflexiones,
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Tu Palabra me da vida
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