Los Salmos son cantos de alabanza al Señor. La mayoría de ellos se les atribuyen al Rey David. Se caracterizan por ser muy personales. Ellos son oraciones llenas de confianza o bien, de impaciencia, de desconsuelo. Son muy directos y muestran con claridad el sentir de los israelitas, quienes "exigian" insistentes una respuesta a Dios, pero siempre elevando una alabanza y aceptando su Voluntad.
Con esta mañana fría de inspiración encuentro este Salmo precioso. Gracias a Dios, porque todavía me sigue hablando de mantener viva mi esperanza que, como lo explicó Salvador, significa "esperar con confianza".
No lo escribo completo porque es muy largo. Ustedes tendrán la tarea de leerlo luego completo si les apetece.
En fin. Feliz dia.
"En Jesús puse toda mi esperanza,
el se inclinó hacia mi y escuchó mi clamor,
y escuchó mi clamor".
ACCIÓN DE GRACIAS DEL REY DESPUÉS DE LA VICTORIA.
Del maestro de coro. De David, el servidor del Señor, que dirigió al Señor las palabras de este canto, cuando él lo libró de todos sus enemigos y de las manos de Saúl.
Salmo 18 (17)
Yo te amo, Señor, mi fuerza, Señor, mi Roca,
mi fortaleza y mi libertador, mi Dios,
el peñasco en que me refugio, mi escudo,
mi fuerza salvadora, mi baluarte.
Invoqué al Señor, que es digno de alabanza
y quedé a salvo de mis enemigos.
Las olas de la Muerte me envolvieron,
me aterraron los torrentes devastadores,
me cercaron los lazos del Abismo,
las redes de la Muerte llegaron hasta mí.
Pero en mi angustia invoqué al Señor,
grité a mi Dios pidiendo auxilio,
y él escuchó mi voz desde su Templo,
mi grito llegó hasta sus oídos.
Él tendió su mano desde lo alto y me tomó,
me sacó de las aguas profundas;
me libró de enemigos poderosos,
de adversarios más fuertes que yo.
Me asaltaron el día en que me iba mal
pero el Señor vino en mi ayuda.
Me sacó a un espacio abierto
me salvó porque me amaba.
porque ¿quién es Dios fuera del Señor?,
¿y quién es la Roca fuera de nuestro Dios?
Es un Dios que me reviste de fuerza
un Dios que allana mis caminos.
¡Viva el Señor! ¡Bendita sea mi Roca!
¡Glorificado sea el Dios de mi salvación!
Por eso te alabaré entre las naciones
y cantaré, Señor, en honor de tu Nombre.
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